El objetivo de esta actuación es dar cobertura al tratamiento de las aguas residuales de la zona Oeste de Gijón y al municipio limítrofe de Carreño para, una vez tratadas con los nuevos y mejorados parámetros, verterlas al mar Cantábrico mediante el emisario submarino de Aboño.

Además de la adecuación del tratamiento de saneamiento del agua, también se acometerán actuaciones de remodelación y ampliación de los distintos elementos de la EDAR, según una nota de prensa del Ministerio.

Estas obras se incluyen en el plan de saneamiento de Gijón y fueron declaradas de Interés General del Estado por el Real Decreto Ley 15/1984.

Para la mejora de esta depuradora, se ha optado por proponer una serie de medidas, de fácil implantación y eficacia contrastada, para cumplir con las condiciones de vertido a zona normal de una aglomeración de más de 150.000 habitantes equivalentes, dotándola del tratamiento secundario adecuado.