El pasado jueves, la reina Letizia estrenaba en su visita a Seúl una falda de cuero de color rojo oscuro y una elegante blusa blanca con bordados que no pasó indiferente. Tan solo 24 horas después, la duquesa de Sussex, Meghan Markle, sorprendía llevando la misma falda al asistir a una mesa redonda sobre la igualdad de género en el Castillo de Windsor.
La prenda, una falda lápiz, pertenece a la firma de moda alemana Hugo Boss y cuesta 427 euros.
A diferencia de doña Letizia, que optó por combinarla con una blusa blanca, la duquesa de Sussex se decantó por un jersey de punto fino color burdeos y cuello en pico.
Meghan Markle ha vuelto así al estilo que la caracterizaba antes de convertirse en madre por primera vez. Eso sí, ambas prendas son una nueva incorporación al vestuario real de la duquesa de Sussex, que suele reciclar sus atuendos.
En su viaje por Sudáfrica, la exactriz recurrió en la mayor parte de las ocasiones a vestidos flojos, ceñidos a la cintura.
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