Mobbing en la casa consistorial de Murcia. O así lo denuncian 56 funcionarios. El pasado 6 de julio mandaron un escrito al alcalde, Miguel Ángel Cámara, denunciando que los trabajadores de Educación sufren «discriminación y presión ambiental por parte de los servicios municipales».
Sus denuncias vienen a confirmar las de la concejal socialista Mariola Martínez. Los funcionarios dicen que algunos trabajadores del Servicio de Educación disponen de diplomas acreditativos de cursos que no han llegado a realizarse y que les obligaron a firmar un documento en el que afirmaban que sí los habían hecho.
Esto último ya lo denunció la edil del PSOE hace más de un mes. Según explicó ayer Martínez, «el día que denuncié que unos cursos presupuestados no se habían impartido reunieron a algunos de los funcionarios en el despacho del concejal de Educación y les hicieron firmar un papel en el que decían que sí habían recibido los cursos. Sólo pido que digan qué han hecho con el dinero».
Por su parte, el concejal de Educación, Francisco Porto, admitió que de los 56 firmantes sólo uno participó en los cursos. Asimismo, tres empleados municipales han denunciado a Mariola Martínez por decir que se habían malversado fondos para la realización de los polémicos estudios de formación.
88.000 euros había de presupuesto este año para la realización de cursos
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