La Conselleria de Sanidad deberá indemnizar con 75.000 euros a un hombre de 43 años al que la anestesia epidural administrada en un hospital de Valencia le produjo una secuela irreversible de paraplejía fláccida en miembros inferiores.

Así lo establece una resolución del Consell Jurídic Consultiu (CJC), que indica que el daño sufrido es consecuencia de la actividad desarrollada, a lo que suma "un daño desproporcionado causado no tanto porque se pueda presumir negligencia, cuanto que con la actuación médica se generó un riesgo que no se pudo controlar, y la falta de consentimiento informado".

Los hechos ocurrieron a mediados de febrero de 2003, cuando a un paciente con antecedentes de diez años de "neoplasia de colon transverso" y que había sido intervenido quirúrgicamente se le implanto, a petición de la UCI, un catéter epidural para analgesia, por presentar un dolor post-operatorio muy intenso que no cedía a la administración de analgésicos.

Tras la retirada del catéter, se evidenció en el paciente una "paraplejía flácida de miembros inferiores", con afectación de las funciones fisiológicas esenciales primarias". Para el CJC, se ha acreditado la producción de un daño por la asistencia sanitaria prestada, al ser los daños sufridos por el reclamante consecuencia del funcionamiento del servicio público.

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