La actuación policial, dirigida por el titular del Juzgado de Instrucción Nº2 de Monzón (Huesca), ha permitido recuperar cinco camiones con sus remolques, 445 electrodomésticos, 25.000 kilos de lingotes de plomo, 25 palés de bombillas y otros 27 con alimentos, 48.000 botellas de bebidas y gran cantidad de prendas de vestir, todo ello valorado en más de un millón de euros.

Los integrantes de la banda, once de los cuales han ingresado en prisión como los presuntos cabecillas de los tres grupos que se encargaban de los robos, actuaban en las provincias de Huesca, Lérida, Zaragoza, Barcelona, Gerona, Madrid, Navarra y Valencia.

La banda actuaba en conexión con una estructura de receptación del material sustraído, cuyo cabecilla también ha sido detenido e ingresado en prisión, y con la colaboración, en dos de los robos, de los camioneros, a cambio de una cantidad de dinero sin determinar.

Las investigaciones se remontan a noviembre de 2007, a raíz de varios robos cometidos en polígonos industriales de las localidades oscenses de Barbastro, Monzón y Fraga, donde sustrajeron varios camiones cargados que fueron abandonados en el área metropolitana de Barcelona. Las similitudes entre estos robos indujeron a la Guardia Civil a sospechar de la presencia de un grupo de personas que disponían de una "importante" infraestructura para llevar a cabo sus acciones.

34 detenidos

La investigación concluyó con la detención de los 34 sospechosos, en su mayor parte en la provincia barcelonesa, en una operación en la que han colaborado agentes de la Guardia Civil de Huesca y Barcelona, y de los Mossos d'Esquadra.

En los almacenes en propiedad o alquilados que tenía la banda, en las localidades catalanas de Anglesola, Barberá del Vallés y Barcelona, se han recuperado hornos de cocina, lavadoras, aparatos de aire acondicionado, palés de cereales, de bebidas isotónicas o de productos de limpieza, pantalones de marca o "delicatessen" gastronómicas de alto precio.

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