Como sucedía antaño en las viejas máquinas de petaco el Ayuntamiento ha logrado una bola extra.

O lo que es lo mismo, más tiempo para solucionar el problema que el mismo se había generado cuando decidió comprar los terrenos que en la actualidad ocupa Panibérica.

El consistorio y la empresa llegaron a un preacuerdo en el que se fija que el Ayuntamiento tendrá tres o cuatro años más (falta concretarlo) para poder pagar los 34 millones de euros que aún le debe a la multinacional (ha pagado ya 16,7) por adquirir sus terrenos en el Callejón de la Alcoholera.

Además, el Ayuntamiento evita pagar una indemnización de más de 2,5 millones a Panibérica por no haberle abonado el 30 de junio todo el montante de la compra.

Lo que no desaparece es el riesgo de que el consistorio pierda cerca de 15 millones de euros si no consigue poder hacer frente a la operación (como le ha sucedido ahora).

Ya que si no ejerce esta opción de compra sólo recuperaría una «mínima cantidad» del dinero adelantado, como explicaron ayer fuentes de la empresa.

Se la jugó y le salió mal

Todo comenzó en 2005 cuando la multinacional de levaduras buscaba un nuevo espacio para levantar su nueva fábrica.

El lugar elegido era el de la antigua fábrica de Nicas y lo único que necesitaba la empresa es que el Ayuntamiento recalificase sus actuales instalaciones, en el callejón de la Alcoholera, para obtener el dinero necesario y poder construir su nueva sede.

Sin embargo, el Ayuntamiento se la jugó y optó por comprar los terrenos de la antigua fábrica (por 52 millones de euros) para poder construir él mismo y sacar un beneficio económico para las arcas municipales.

El problema es que la crisis inmobiliaria le ha pillado de lleno y ahora esta parcela «vale la mitad de cuando se tasó», tal y como explicó ayer el alcalde.

León de la Riva confía en que con esta bola extra de tiempo se supere la crisis de la construcción.

Panibérica seguirá en Valladolid

PSOE e IU han sido contundentes tras conocer el preacuerdo. «Hay que dar gracias a que Panibérica quiere quedarse en Valladolid. Sólo les han puesto trabas».

Los responsables de la compañía confirmaron también su continuidad, pese a que les toca buscar una complicada financiación para seguir con la construcción de la nueva fábrica. Así, los 180 empleos están asegurados.

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