El jefe de servicio de Salud de la Delegación Provincial de Salud de la Junta de Andalucía en Málaga, Juan Borrajo, explica que el pasado 30 de abril se descubrió el caso de la niña e inmediatamente se activó el protocolo de actuación para esta enfermedad, que pasa en primer lugar por el estudio de familiares del afectado.

A los familiares se les practicó la prueba del mantoux para detectar si se había producido contagio del bacilo de la tuberculosis, además de radiografías de tórax y analíticas.

Todo negativo

Todas las pruebas fueron negativas entre los familiares, por lo que se procedió, en el siguiente paso del protocolo, a analizar a los compañeros de guardería y profesores de la menor hasta que el pasado 10 de junio se produjo la confirmación del contagio de la monitora.

En días siguientes, los responsables sanitarios se reunieron con los padres y efectuaron el test a los 113 niños de la guardería. El pasado lunes se comprobó que no había más niños enfermos o infectados, aunque Borrajo ha señalado que durante los próximos dos meses deberán seguir un tratamiento a base de antibióticos.

Está previsto que a mediados de agosto vuelvan a repetirse las pruebas a alumnos y profesores.

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