Luis Díaz Alperi lleva 13 años como alcalde de Alicante, pero ayer se cumplieron 12 meses de su última toma de posesión, tras conseguir el 44% de los votos en las elecciones municipales de mayo de 2007.

Este primer año de legislatura municipal se ha caracterizado, en el plano positivo, por el traslado del mercadillo a Teulada, que ha permitido liberar la zona de Campoamor para construir los futuros auditorio, parking y un paseo arbolado, la creación de la línea 12 del autobús hasta los PAU (pese a que se ha suprimido la línea 28) y el proyecto de ampliación del muelle de Levante con motivo de la salida, en octubre, de la Volvo Ocean Race (iniciativa conjunta al Consell).

Sin embargo, uno de los incumplimientos más impopulares ha sido la subida de tributos municipales como el IBI (del 4,48%, fraccionado en dos años)o el impuesto de circulación (un 15,2%). Según el primer edil, no se incumple el programa electoral, ya que en éste se planteaba «contención de impuestos y no congelación».

Para el alcalde, «congelación es no tocar los impuestos y contención es no producir subidas desmedidas ni crear impuestos nuevos».

Mientras, Roque Moreno, portavoz del PSOE, hizo ayer balance del primer año de Alperi en la presente legislatura. Desgranó otros retrasos, incumplimientos y carencias, como «la deuda económica que acumula el Ayuntamiento o la falta de rehabilitación de las viviendas de la Zona Norte; tampoco se ha reunido con los vecinos de la zona sur por los problemas de contaminación del puerto;la ciudad está sucia y ahora retira la nueva ordenanza de limpieza. Y sólo ha presentado dos maquetas: la del Palacio de Congresos y la del Rico Pérez».

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