A las 22.20 horas, los compases de Bandido confirmaban que este primer concierto de la nueva gira española de Papitour, un homenaje a los 30 años de carrera de Bosé, sería un festival de números 1 coreados hasta el último verso por sus miles de fans.

Así fue a lo largo de todo el directo que, sin embargo, regaló más de una sorpresa. La primera, corroborar que la voz del cantante soporta con entereza los embistes de dos horas y media de actuación.

La segunda, la intervención de algunos de los artistas que participan en el disco Papito -Alaska, Laura Paussini y Bimba Bosé- y de otros como Mikel Erentxun y el chef Sergio Arola, que esa noche cambió los fogones por una de sus pasiones ocultas: la guitarra.

Los temas Bambú, Sevilla, Como un lobo, Morena mía, Reina, Si tú no vuelves, Don Diablo o Superman despertaron baile y delirio entre el público, pero el momento más emotivo de la velada se produciría un poco más tarde, cuando el artista invitó a los presentes a mirar por última vez hacia el pasado -aseguró que nunca volvería a interpretar en directo los temas que luego entonaría- y recuperó las letras pudorosas y enamoradas de Linda y Creo en ti, dos de sus primeras composiciones.

La nota desmandada y divertida la ofreció el dueto formado por los guitarras Pedro Andrea y Tolo Pueyo, quienes se deshicieron pronto de las elegantes camisas oscuras que combinaban con las del resto de la banda para mostrar pecho y adoptar difíciles posturas del rock.

La gira de Papitour sigue ahora en Valencia (14 y 15 de junio), Sevilla (19) y Murcia (21).