Primero fue el Prestige el que dio la voz de alarma sobre la coordinación del accidente y luego fue el New Flame, que permaneció varios días encallado en el Estrecho de Gibraltar antes de hundirse y contaminar las aguas de la Bahía de Algeciras. Ahora, el litoral andaluz se ha dotado de un plan para este tipo de catástrofes.

Se trata del Plan de Emergencia ante el Riesgo de Contaminación del Litoral en Andalucía (Pecla), aprobado ayer por el Consejo de Gobierno de la Junta. Cubre 1.100 km de costa correspondientes a 75 municipios de Huelva, Cádiz, Málaga, Granada, Almería y Sevilla, ya que también incluye los tramos de río afectados por las mareas.

Protocolo de actuación

En caso de un vertido, se activa el plan y se crea un centro único de coordinación de todos los operarativos. El Sistema de Emergencias 112 se convierte en el nexo coordinador de los recursos. En la zona afectada se establece un puesto de mando avanzado para las intervenciones directas formado por técnicos de Protección Civil, bomberos, fuerzas de seguridad

El plan lo dirigirá el titular de la consejería de Gobernación si el vertido es de alcance regional, o el delegado provincial si sólo afecta a una provincia.

Asesoramiento

El plan incluye la creación de tres órganos consultivos para apoyar la toma de decisiones: el Comité Científico Técnico, (especialistas en vertidos), el Comité Asesor (representantes políticos de la administración y zonas afectadas) y el Órgano de Participación (colectivos sociales).

Un plan con lagunas

«La Junta no puede esperar a que lleguen los vertidos». Así lo denuncia el miembro de Ecologistas en Acción Antonio Muñoz, quien denuncia las «lagunas» de esta iniciativa?A su juicio falta la cooperación con ministerios como el de Marina o Asuntos Exteriores y crear un plan preventivo para revisar los cascos de los buques o que hayan pasado las revisiones técnicas, entre otros.

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