Castiel, que ha comparecido ante los medios junto al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, para comunicar públicamente su decisión, dirigía el Festival de Cine Español desde la primera edición del certamen, que se celebró en 1998, y el Teatro Cervantes desde 1995.

Visiblemente emocionado, Castiel ha leído un comunicado en el que ha señalado que desde hace casi trece años ha trabajado "por encima de tiempos, presupuestos y de la vida personal en la gestión cultural de la ciudad".

Por su parte, el alcalde ha señalado que las razones aducidas por Castiel son "absolutamente de índole personal y familiar" y "de suficiente peso", y que el director dimisionario ha aceptado "seguir vinculado en el futuro al Teatro Cervantes y al Festival de Cine".

Se da la circunstancia de que en el próximo consejo de administración IU había solicitado conocer las retribuciones de Castiel, y que es uno de los cargos municipales con el sueldo más alto. La coalición, que considera incompatible que se cobren dos salarios públicos, denuncia no han hecho público las cuentas ni los contratos del Festival, lo que ha generado críticas por "opacidad".

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