El locutor de la cadena COPE, Federico Jiménez Losantos, mostró esta noche su "sorpresa" por la declaración de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, como testigo en el juicio por injurias al alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón. Además, insistió en que su "obligación" como periodista es "seguir investigando" el atentado del 11-M en Madrid, "perpetrado para echar del poder al PP".

Aguirre respaldó a Gallardón. Preguntada por su relación con Losantos y Gallardón por la titular del Juzgado de lo Penal 6 de Madrid, declaró tener "amistad con los dos" y dijo no creer que Gallardón estuviera en contra de la postura del PP en las investigaciones de los atentados ni que abogara por "obviar" estas pesquisas, pues, según recordó, el primer edil sólo dijo que había que "mirar al futuro".

En declaraciones en la cadena COPE, Losantos criticó el "comportamiento poco heroico" del resto de los testigos llamados a juicio a petición de su defensa, en referencia al vicepresidente del Ejecutivo madrileño, Ignacio González, el secretario general del PP, Ángel Acebes, y el ex portavoz del Grupo Popular en el Congreso Eduardo Zaplana.

Losantos se quejó de que "todos los enemigos encarnizados de Gallardón" se olvidaran el miércoles de lo que le habían contestado al alcalde cuando éste pidió "obviar el 11-M". "Si no querían hablar por no hacer daño al partido, pues que no hubieran declarado o que lo hubieran hecho por escrito", apostilló.

"Triste" juicio

El periodista dijo que su "opinión" sobre Aguirre no va a cambiar a partir de ahora. "No ha estado bien, pero me duele más por su perfil político", explicó antes de precisar que "reñir para siempre es imposible".

No obstante, Losantos insistió en que a Gallardón "le da igual lo que pase con el 11-M" aunque "pueda decir una cosa y la contraria". "Es la historia de una permanente traición a su partido, de llevarle la contraria al PP", dijo sobre el alcalde de la capital, al que, según el locutor de la COPE, el ex presidente del Gobierno José María Aznar calificaba como "el desleal más perfecto que había encontrado nunca".

Losantos defendió que, con este "triste" juicio, Gallardón quiere sentarle en el banquillo para "amedrentarle" como periodista. Además, criticó algunas "cosas alucinantes" del juicio como que no dejaran a su abogada preguntar a Gallardón sobre su "trayectoria política" o que se permitiera al regidor madrileño leer "una chuleta que llevaba preparada con una sarta de mentiras" que, dijo, había previamente "desmentido" al fiscal. "Se ve que lo habían preparado juntos", apostilló en referencia a Gallardón y al propio fiscal.