Hasta 10.601 niños de P3 y primero de Secundaria deberán ir a clase a centros que sus padres no escogieron como primera opción. Aún así, según datos del departamento de Educación, el 91,1% de los casos (108.555) han sido admitidos en el primer centro deseado, un punto más que el año pasado, aún cuando hay 3.305 preinscritos más en estos dos cursos. En la preinscripción se pueden elegir cinco centros.

Que haya hermanos escolarizados (40 puntos), vivir cerca (30), trabajar alrededor (20) son los criterios generales que más se tienen en cuenta a la hora de asignar el centro. Es en P3 dónde menos alumnos han sido admitidos en primera opción (90,3%). En Barcelona ciudad son un 89,4%, cifra parecida a la del entorno a la capital. Lleida (95,5%) es el servicio territorial dónde más se respeta la primera opción de los padres.

En primero de ESO, el 92,6% de los niños irá al centro elegido por la familia. De nuevo, las cifras suelen ser mejores en las zonas menos pobladas que en las urbanas (Barcelona Ciudad, 91%; Lleida, 96,1%).

Todos los niños tienen garantizada una plaza en la escuela, ya sea pública o concertada. Los últimos años se ha producido un incremento significativo de la demanda en educación infantil. En sólo dos años, los preinscritos en P3 son 6.013 más, un 8,5% más. Ayer también se hicieron públicas las listas del resto de cursos, que sólo hace falta hacerla si se cambia de centro. En total hay 25.297 niños, que son 421 menos que el curso pasado. El 30 de junio se publicarán las plazas libres en los centros.