El Ayuntamiento de Amorebieta ha sido condenado a no retirar la escultura conocida popularmente como 'La Patata' por haber pactado su ubicación en un contrato con su autor, Nagel.

En la sentencia del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Bilbao se considera que el contrato impide que se cambie de lugar y que no hay un interés público que justifique la retirada de la escultura de su actual ubicación.

Nagel demandó al Ayuntamiento, cuya anterior alcaldesa había encargado la escultura para la rotonda en la que está situada, al entender vulnerado su derecho moral a la integridad de la obra por constarle la intención municipal de reubicarla. El artista reclamaba que se prohibiera al Consistorio su retirada, sin solicitar ninguna indemnización.

En el juicio celebrado el pasado 15 de abril, el Gobierno municipal alegó que no tenía tomada ninguna decisión, aunque se estaba reformando el lugar para permitir la peatonalización entre el Centro Social Zelaieta y la Herriko Plaza, junto a la casa consistorial.

No obstante, en la sentencia hecha pública hoy se declara que el Ayuntamiento sí tenía intención de retirar 'La Patata', puesto que está remodelando la zona y ha presentado un dictamen judicial que lo justifica, así como una partida presupuestaria de 2.000 euros con este objetivo.

El Ayuntamiento de Amorebieta, por su parte, ha mostrado su satisfacción por la sentencia ya que "ha desestimado la petición del artista de prohibir al Consistorio mover la escultura". Además, el Gobierno municipal quiere mostrar su tranquilidad "porque si hubiese un interés público relevante podría trasladarse". Por estos motivos, ha decidido no recurrir la sentencia.

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