Precisamente el título más importante, la Copa de las Naciones, también ha llegado en esta temporada. En esa competición, celebrada hace sólo tres semanas en Portugal, las de Elche supieron imponerse a equipos de Japón, Brasil, Estados Unidos, Ucrania y Portugal, en un torneo que viene a ser un Mundial de Clubs.

La alegría de aquellos días volvió a repetirse este fin de semana tras la victoria del conjunto ilicitano en un arrollador partido ante el Mainfer Zaragoza. Las chicas entrenadas por Carlos Navarro lograron endosarle un 1-5 al equipo maño, sentenciando con ello la Liga una semana antes de su conclusión.

El dominio del Femesala en esta competición ha sido disputado pero constante. El nivel de la Liga ha subido mucho en los últimos años pero las locales han logrado una nueva proeza en este séptimo título: mantenerse líderes de la clasificación desde la primera a la última jornada. Las ilicitanas sólo han cedido en una competición, la Copa de España, en la que se quedaron subcampeonas ante el Enconfra Navalcarnero, justo ganador que, además, ha quedado segundo en la clasificación de Liga.

Ante semejante cosecha de títulos no es extraño que su pabellón de juego, el Esperanza Lag, haya logrado buenas entradas en los partidos locales, llegándose a 1.700 espectadores en la parte final del campeonato nacional. Igualmente es lógica la inmensa alegría que el nuevo trofeo ha causado entre integrantes del club y sus aficionados, así que la fiesta ya comenzó en la capital aragonesa tras el partido y el domingo se trasladó a las calles de Elche.

Temprano, a las diez de la mañana, las jugadoras del Femesala se bañaron en la fuente del Parque Municipal para celebrar así el triplete de títulos que tanto esfuerzo ha costado en este año irrepetible y que brindaron a la afición que les ha apoyado en todos estos momentos.

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