Tras obtener el certificado técnico, la Carpa Aragón podrá reabrir este martes y continuar con su programación, pero tendrá que tener siempre las lonas echadas, sin abrirlas ni sujetarlas a los lados porque se podría dañar la estructura.

Este lunes, durante una inspección rutinaria del servicio de protección contra incendios se vieron unas lonas retiradas por lo que se personaron efectivos de bomberos de la Policía Local y técnicos de Zaragoza Cultural que adoptaron unas medias de seguridad, como acordonar la zona de trabajo, porque estaban cerca del área de la brasa y aunque son de plástico ignífugo tienen un peso importante que podría causar problemas a los trabajadores o visitantes.

Por ello, se decidió la pasada noche precintar el recinto y se le hizo un requerimiento al empresario para subsanar las deficiencias y al finalizar la tarde se comprobó que se habían incorporado las lonas, pero estaban a expensas de certificado técnico que verifique que la carpa está con las debidas condiciones de seguridad y que no se altera la instalación.

La configuración de la carpa es cerrada y el empresario tiene que tener los medios suficientes para ventilar sin abrir las lonas porque entonces se pueden crean otras tensiones en la estructura y si se concibe cerrada tiene que permanecer de ese modo, ha explicado este martes la gerente de la sociedad municipal Zaragoza-Cultural, Elena de Marta.

Por su parte, el director general de Cultura, David Lozano, ha incidido en que la prioridad es "la seguridad en todos los rincones de cualquier parte de la ciudad para que todas las personas disfruten de las fiestas sin problemas".