La polémica asignatura Educación para la Ciudadanía se impartirá el próximo curso en Castilla y León, en 2º de la ESO, sin carga ideológica, «sin la doctrina», por lo que nada tendrá que ver con la misma materia en otras comunidades, «especialmente las socialistas».

La Junta presumió este jueves de ello pese a que esta decisión ha sido recurrida por el Ministerio de Educación.

Por ejemplo, los estudiantes de Castilla y León no leerán en su libro temas sobre «discriminación por razón de sexo u orientación afectivo-sexual», «relaciones entre hombres y mujeres», «valoración crítica de la división social y sexual del trabajo» o «principales servicios públicos que deben garantizar las administraciones», según el Ministerio de Educación.

Además, la Junta rechazará las objeciones de conciencia de 1.090 padres. Les dice que no deben preocuparse precisamente porque «se ha quitado la carga ideológica». Añaden que si les eximen de la asignatura perjudican a los niños, que no podrían graduarse.

A los obispos no les gusta nada

Los obispos de Castilla y León emitieron un comunicado en el que piden a la Junta que no se imparta la asignatura «al menos en la forma en la que está programada».

Afirman que hay sentencias en contra y que los padres tienen todo el derecho a objetar.

Aseguran que el Estado no puede «imponer una formación de la conciencia de los alumnos al margen de la libre elección de los padres».

CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE VALLADOLID