Diviértete mientras trabajas

  • El humor es lo más parecido a la felicidad.
  • Nuestro trabajo se beneficiará de una actitud positiva.
  • La jornada laboral se nos hará mucho más corta.
Primera marcha por la diversión en el trabajo, realizada en el Paseo de la Castellana el pasado 1 de abril.
Primera marcha por la diversión en el trabajo, realizada en el Paseo de la Castellana el pasado 1 de abril.
20MINUTOS.ES
Primera marcha por la diversión en el trabajo, realizada en el Paseo de la Castellana el pasado 1 de abril.

Como dijo Jardiel Poncela: «Me divierte escribir y me pagan para que escriba. O sea: que me pagan para que me divierta.» Ése debería ser nuestro objetivo profesional: poder disfrutar con lo que hacemos.

No todos tenemos la suerte de amar nuestra profesión, pero indudablemente sí podemos hacer muchas cosas para compaginar dar buen rendimiento laboral y pasarlo lo mejor posible, al mismo tiempo.

Esta posibilidad ya se ha reconocido a nivel global: existe un Día Internacional de la Diversión en el Trabajo (1 de abril) y en libros como Alta diversión (Alienta Editorial) Eduardo Jáuregui y Jesús Damián explican cómo conseguir divertirse mientras se trabaja.

La ciencia nos asegura sin lugar a dudas que la risa tiene efectos muy positivos sobre el organismo: ayuda a liberar endorfinas, reduce el estrés, etc.

También los tiene sobre nuestro actividad profesional. Existen estudios recientes que demuestran que el humor fortalece la motivación, favorece el aprendizaje, crea un entorno agradable, hace más fáciles las labores en equipo y aumenta las ventas.

Seamos empresarios o empleados debemos beneficiarnos del humor en el trabajo. Podemos ser creativos o recurrir a los ya abundantes libros sobre el tema. Propongámoslo a nuestros compañeros y nos sorprenderá la buena acogida que recibiremos.

A fin de cuentas sólo estaremos sistematizando una tendencia ya existente, pues las bromas, los chistes, etc., son cosa corriente en todos los ámbitos laborales.

Algunas propuestas concretas:

  • Organizar concursos de las fotos más feas de los compañeros, o de cuando eran bebés.
  • Iniciar las reuniones con una ronda de chistes.
  • Hacer pequeños obsequios alusivos a las peculiaridades de cada uno.
  • Organizar días temáticos: todo el mundo con sombrero, con corbatas horteras, etc.
  • Hacer competiciones de habilidades raras (imitar aminales, mover las orejas, etc.)
  • Prepararle una inocentada divertida a los más serios de la empresa, procurando, eso sí, no gastar bromas pesadas.
  • Celebrar la Navidad o cualquier otra fiesta fuera de fecha.
  • Alterar el orden de las reuniones o de las actividades habituales.
  • Otorgar vistosos certificados a todos, según sus habilidades, en un acto solemne.
  • Hacer una búsqueda del tesoro por la oficina, tras haber ocultado algún regalito.
  • Cantar todos a coro una canción pachanguera todos los días a la misma hora.
  • Jugarse el café o las cañas a los chinos.
  • Organizar concursos de aviones de papel o cosas semejantes.
  • Decorar la oficina de manera estrambótica.
  • Componer versos alusivos para los compañeros y leerlos en voz alta.
  • Conmemorar incidentes de poca importancia.
  • Compartir diariamente chistes y anécdotas.
  • Cualquier otra cosa rara que se nos ocurra.
Mostrar comentarios

Códigos Descuento