Así lo ha anunciado el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez Quiñones, al reunirse con los alcaldes de ambas localidades, en las que se quemaron más de 1.400 hectáreas hace un mes, de las que el 93% son de montes de utilidad pública.

"El plan de restauración y recuperación de diez años para recuperar una zona quemada lleva un trabajo largo", ha señalado el consejero, que también se ha reunido con los responsables del Centro de Mando contra incendios en la provincia de Ávila, a los que ha felicitado por su trabajo en las "complicadas" últimas semanas debido a los diversos fuegos "muy complejos" acontecidos para "proteger las personas y el medio ambiente".

"Lo más urgente es recoger la madera quemada que pueda producir enfermedades al monte", ha señalado, en unas labores en las que los técnicos de Medio Ambiente trabajan ya, a unos monres a los que se ha llegado "para quedarse" porque es "una labor de años".

Por otra parte, el consejero ha explicado que no será necesario estudio de impacto ambiental para llevar a cabo las obras de trasvase de agua del embalse de Las Cogotas para suministro a la capital abulense.

Según ha dicho, gracias a un informe actualizada de la Delegación Territorial de la Junta no deberá elaborar el informe que retrasaría el proyecto, aunque no ha precisado fechas porque depende del Gobierno de España, pero el proyecto cumplirá "estrictamente" en materia medioambiental y eso le es suficiente al Gobierno.

"Debe reconocer el compromiso serio del secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán", en este proyecto, para lo que se reunió hace una semana.

"No se puede consentir que una ciudad Patrimonio de la Humanidad como Ávila tenga problemas de abastecimiento de agua en el siglo XXI", ha señalado Suárez-Quiñones.