El Gobierno Vasco ha expresado su desacuerdo con la proposición de ley de Elkarrekin Podemos para el establecimiento de un impuesto sobre estancias turísticas en Euskadi, al considerar que cualquier medida de estas características debe trabajarse "conjunta y coordinadamente" con el resto de instituciones y con el propio sector.

El Ejecutivo autonómico ha recordado que los agentes turísticos"ya se ha manifestado de manera unánime" contra la puesta en marcha de un impuesto de este tipo, entre otras razones, porque se trata de un sector "que se encuentra aún en fase de consolidación".

Además, el Gobierno ha subrayado que la política fiscal de Euskadi "se coordina y armoniza" entre los tres niveles institucionales vascos: autonómico, foral y municipal.

A su juicio, implantar una tasa turística generalizada desde elGobierno, sin el consenso con las diputaciones forales y los ayuntamientos, "sería contradictorio" con el modelo tributario vasco, basado en el acuerdo y la colaboración entre administraciones.

El Ejecutivo ha precisado que ya está realizando "numerosasacciones" en el marco de un plan conjunto para que el turismo vasco tenga un desarrollo "adecuado y sostenible".

Por otra parte, el Ejecutivo ha mostrado su criterio favorable a la tramitación de la propuesta del PNV y el PSE-EE para la reforma de la ley de turismo.

ALOJAMIENTOS RURALES

Esta reforma tiene el objetivo de regular, de forma específica y con rango de ley, los servicios turísticos de alojamiento en viviendas o habitaciones particulares en el ámbito rural.

El Gobierno Vasco considera que se trata de una medida necesaria, en la medida en que "contribuirá a que las actividades económicas que se desarrollen en el ámbito rural sean respetuosas y sostenibles con las explotaciones agrarias tradicionales de los caseríos".