Por el momento, el Director General de la Conselleria de Agricultura, Rogelio Llanes, ha remitido escritos al Síndic para justificar las medidad que aplica la Conselleria alegando que son de obligado cumplimiento, según la Decisión de Ejecución 2015/789 de la Comisión de 18 de mayo.

Los afectados han pedido "aplicar medidas de contención menos agresivas, que supongan solo el arranque de árboles infectados", pero según el informe de la Conselleria estas actuaciones solo se permite ejecutarlas "en los territorios incluidos en el Anexo 2, entre los que no se encuentra la provincia de Alicante".

Asimismo, la Conselleria advierte en el escrito que "la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria ha publicado "una actualización de su análisis" en cuyas conclusiones destaca que "no se conoce cura para las plantas infectadas", de ahí "la importancia crucial de aplicar medidas de control que prevengan su dispersión", pues podrían "transmitir la enfermedad durante toda su vida".

La Conselleria informa, además, que ha "convocado ayudas para la erradicación y control de la bacteria por 2,35 millones en 2018 y 2,2 millones en 2019".

Las medidas no son suficientes para los afectados de la Xylella Fastidiosa, ya que según han indicado, benefician principalmente al sector viverista y para los productores que sufren un mayor daño "suponen una cantidad irrisoria" y la "erradicación de los árboles 100 metros a la redonda a partir del ejemplar infectado no está dando resultados, como demuestra el hecho de que la plaga continúa expandiéndose".

Los productores están a la espera de la respuesta del Síndic de Greugues y de que la Conselleria de Agricultura evalúe la efectividad de las medidas que aplica la Administración para poder estudiar un cambio de estrategia, tal y como les anunció la consellera Mireia Mollà.