El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, confía en que la implantación de una Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en Barcelona a partir de 2020 reduzca el nivel de contaminación por dióxido de nitrógeno (NO2) por debajo del tope permitido y evite con ello una multa de la UE.

La Comisión Europea tiene previsto denunciar este jueves a España ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) por incumplir la normativa europea de calidad del aire en Madrid y Barcelona, han confirmado este miércoles a Efe fuentes comunitarias, aunque la decisión no será publicada hasta mañana.

Según la Comisión Europea, el procedimiento de infracción ha sido abierto por los excesos de dióxido de nitrógeno registrados en Madrid, Barcelona y el área del Llobregat, que exceden los niveles máximos de la normativa comunitaria vigente desde 2008.

Desde la Generalitat, el conseller de Territorio y Sostenibilidad ha recordado que hay otras grandes capitales europeas que han sido multadas por rebasar los límites de contaminación atmosférica, como Sttutgart (Alemania), Londres (Gran Bretaña) y París (Francia), y ha reconocido que las advertencias de la UE por la contaminación en el área de Barcelona se iniciaron en 2010.

"En aquel año eran diecisiete las estaciones de medición de contaminación por dióxido de nitrógeno de Barcelona en las que se superaba el tope de 40 microgramos por metro cúbico de media anual, pero hemos ido evolucionando en positivo, y en el año 2017 ya eran sólo cinco y en 2018 son sólo dos" situadas en el centro de la ciudad.

En estas dos estaciones, sin embargo, se sigue superando el mencionado tope de 40 microgramos por metro cúbico, y en 2018 la media que registraban era de 55 y 46, ha precisado el conseller Damià Calvet.

"Estamos a la espera de conocer el contenido del informe de la Comisión Europea, y nos coordinaremos con el Gobierno del Estado y otras instituciones para poder abordar la situación", ha indicado.  En su opinión, las medidas que contempla la Generalitat pasan por seguir incentivando el transporte público y, sobre todo, la implantación de una Zona de Bajas Emisiones a partir de enero de 2020.

Una zona que coincide con el perímetro interior de las rondas de Barcelona y donde no podrán circular los vehículos sin el distintivo ambiental de la DGT.

En función de los resultados que ofrezca esta zona de bajas emisiones, la Generalitat no descarta implantar posteriormente otras medidas más contundentes, como por ejemplo "los peajes de contención" para entrar en Barcelona, pero Calvet ha insistido en que de momento no serán habilitados.