En concreto, la ONCE prestará a los estudiantes extranjeros los servicios de atención educativa, asignando un maestro del equipo específico como profesional de referencia, atención a través del servicio de rehabilitación para facilitar la movilidad en los distintos recorridos necesarios, prestación de apoyo desde el área de tiflotecnología, libros en formatos braille y sonoro, participación en las actividades de animación sociocultural y apoyo a los estudiantes Erasmus que sean usuarios de perro guía.

Por su parte, la UVA atenderá a los estudiantes Erasmus con discapacidad visual, a través de sus servicios universitarios de Relaciones Internacionales y de Asuntos Sociales, aportando sus recursos técnicos, los correspondientes profesores de referencia en cada centro y los productos de apoyo tecnológico de que dispone, señala la institución provincial a través de un comunicado remitido a Europa Press.

Las actuaciones conjuntas se iniciarán próximamente con la llegada de una estudiante con ceguera y perro guía que procede de una universidad francesa y realizará una estancia universitaria durante el próximo curso.

Con este nuevo acuerdo, la Universidad de Valladolid y la ONCE prosiguen en su "esfuerzo conjunto" por fomentar la accesibilidad a las aulas universitarias y la inclusión social de las personas con discapacidad visual.

Ambas instituciones colaboran desde hace años en la ejecución de políticas de accesibilidad universitaria, inclusión educativa y social de las personas con discapacidad visual y ceguera, lo que está permitiendo igualdad de oportunidades para que las personas afiliadas a la ONCE puedan obtener su titulación universitaria, a fin de facilitar su acceso a un empleo de calidad en el futuro.