La Policía Nacional ha desarticulado una red que se dedicaba a expoliar yacimientos arqueológicos en Aragón, Andalucía y Valencia.

Se han intervenido miles de piezas, entre ellas más de 12.000 monedas de distinta tipología y época, 72 armas de fuego y 8 detectores de metales, y han sido detenidas 20 personas, una de ellas en Zaragoza.

Los detenidos recorrían yacimientos, tanto de día como de noche, y sustraían los materiales. Después los vendían a conocidos y a establecimientos comerciales o los subastaban por Internet.

Los expoliadores han causado daños irreparables en los yacimientos, alguno de ellos desconocidos, por lo que la Administración no conocía las actividades ni tenía catalogadas algunas de las zonas.

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