La primera teniente de alcalde y concejal de Ciudadanos, Ana Suárez, ha reconocido que el acuerdo alcanzado con el PP para apoyar la candidatura de Carlos García Carbayo para que continuase como regidor municipal fue "fácil" porque ambas formaciones "no partían de la nada".

Según sus palabras, ayudó al pacto el hecho de que ambas agrupaciones ya aprobasen conjuntamente los presupuestos de los últimos cuatro años, entre otras medidas, además de contar hace cuatro años con el visto bueno de los dos partidos para que fuese también el PP quien estuviese al frente del Consistorio, en ese caso de 2015 con el 'popular' Alfonso Fernández Mañueco.

Para Suárez, esta "sintonía" entre ambas partes ha permitido firmar un "documento programático" con "62 medidas muy concretas y muy realistas" que el equipo de Gobierno tendrá que llevar a cabo en los próximos cuatro años. "Es un compromiso no con el PP, es un compromiso de Ciudadanos con Salamanca", ha reseñado.

Asimismo, dentro del pacto "relativamente sencillo", Suárez ha valorado que los grupos Popular y de Ciudadanos hayan acordado que los concejales de la formación naranja estén al frente de las "áreas fundamentales" de Promoción Económica, Innovación, Turismo y Bienestar Social.

En cuanto a las críticas desde el PSOE por no sentarse en la mesa con los socialistas, la concejal del partido naranja ha insistido en que negociar con el PP era "el proceso más natural" después de los acuerdos de los últimos cuatro años en Salamanca y que haberse reunido también con los socialistas hubiese sido "mercadear" y "sacar a subasta" el Ayuntamiento.

"Hubiera significado aprovecharnos de la ocasión, hubiera sido muy fácil sentarnos y decir: a ver qué nos ofrecéis", en el caso de que Ciudadanos hubiera querido "acumular puestos o sueldos", ha apuntado Suárez.

Por ello, después de optar únicamente por la reunión con el PP, tras la "sintonía" de los últimos cuatro años, la concejal de Ciudadanos ha criticado la "deriva" con sus acusaciones del portavoz del PSOE, José Luis Mateos.

Sobre el líder socialista, Suárez ha lamentado que haya "intentado mercadear y subastar" con la Alcaldía de Salamanca y "ofrecer un espectáculo bochornoso" con "una forma de afrontar la derrota propia de un niño, una forma de afrontar la derrota de manera inmadura" y con "la rabieta del repelente niño Vicente".

Para Suárez, quien ha atendido por primera vez a los medios de comunicación en Salamanca después del pacto entre PP y Ciudadanos y tras la toma de posesión de su acta de concejal, alguien que "afronta la derrota" como ha hecho José Luis Mateos "no puede ser alcalde", pues "no sabe perder".

En la rueda de prensa, donde ha reconocido que su grupo pedirá la asignación de cuatro cargos de confianza -actualmente tiene tres-, ha mostrado su "ilusión" por encarar las nuevas responsabilidades dentro del equipo de Gobierno, con el objetivo de poner en marcha las medidas que contempla el acuerdo programático.

Finalmente, sobre la renuncia de su acta de concejal por parte de la 'número dos' de su partido en las últimas listas municipales, María Mayoral, Suárez ha mostrado su "respeto" por la decisión tomada pero ha reconocido que "no entiende" su salida.