En lo que llevamos de década la capital del Baix Vinalopó ha pasado de necesitar 17.319.000 metros cúbicos de agua a los 15.676.000 que fueron gastados en 2007. Es decir, el consumo ha aminorado en más de 1,6 hm3 en este periodo, mientras que la población ha crecido en cerca de 32.000 personas.

Ordenanzas, sensibilización e infraestructuras

La Concejala de Aguas del Ayuntamiento de Elche, Mª Teresa Sempere, considera que esta situación hídrica es “satisfactoria” y se debe a la aplicación de la “ordenanza municipal para el ahorro de agua aprobada en 2005, las campañas de sensibilización ciudadana y las inversiones en modernas infraestructuras hidráulicas que se han llevado a cabo a través de la empresa mixta Aigües d’Elx ”.

Entre las medidas a destacar resaltan la ornamentación artificial que presentan las nuevas rotondas o los campos de césped sintético como los instalados en la ciudad deportiva de Altabix o en el Polideportivo Municipal de Carrús, que tuvieron un coste de 600.000 euros cada uno. Los responsables municipales también han destacado otras medidas, como es el caso de la disminución de la presión de agua en horario nocturno o el regadío por goteo en lo tocante al cuidado de los grandes jardines y huertos de palmeras de Elche.

Desde época musulmana la ciudad ilicitana ha dado buena muestra de su aprovechamiento hídrico, siendo precisamente el Palmeral un recurso para el asentamiento de otros cultivos más necesitados de riego. Sin embargo la disciplina urbana no es suficiente para asegurar las actuales necesidades del campo y es por ello que los regantes se encuentran en una situación precaria que les condiciona a solicitar caudales provenientes de otros acuíferos, como los de Villena, el trasvase del Tajo y el futuro del Júcar, al igual que de la desalación.

CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE ELCHE.