El estadio tiene la capacidad de albergar a 53.000 potenciales espectadores y para solventar cualquier situación de riesgo y proporcionar una asistencia sanitaria "rápida, segura y efectiva" a todas las personas que se encuentren en el recinto de San Mamés y alrededores. IMQ despliega en cada partido más de un centenar de sanitarios que prestan los cuidados y tratamientos necesarios, y proceden al traslado urgente de cualquier emergencia que lo requiera.

El equipo asistencial de San Mamés cuenta con 12 profesionales sanitarios en cada partido (4 médicos y 8 enfermeros), además de un responsable de operaciones y más de 75 estudiantes de medicina distribuidos entre la enfermería central, enfermería UEFA, siete enfermerías periféricas y el propio campo de fútbol. En cada partido se cuenta, igualmente, con tres ambulancias, una de las cuales es una UCI (SVA Soporte Vital Avanzado).

El equipo sanitario está perfectamente coordinado con otros soportes de seguridad como son Prosegur, Ertzaintza y el propio personal del Club, dado que muchas veces son estos quienes dan los avisos de asistencias o ayudan a evacuar a los pacientes. El citado equipo, además, se puede ver ampliado en partidos especiales, como son los de competiciones europeas o de alto riesgo.

Traumatismos, cefaleas, heridas y mareos han sido los diagnósticos más atendidos en la temporada 2018-2019. La actividad asistencial durante la citada temporada arroja un 73% de casos atendidos en el estadio, habiéndose necesitado traslado sólo en un 27% de los casos.