Una operación policial concluye con cuatro individuos detenidos y con la recuperación de varias decenas de obras de arte valoradas por la Junta de Andalucía en torno a 600.000 euros.

Las obras recuperadas habían sido sustraídas en un domicilio particular de Espartinas (Sevilla) y en una ermita de la localidad de Osuna.

La investigación policial comenzó en febrero de 2005 a raíz de un robo perpetrado en Espartinas, donde varias personas sustrajeron un cuadro pintado al óleo con la figura del Arcángel San Miguel, atribuido a la escuela de Zurbarán.

Posteriormente, en mayo de 2007, tuvo lugar la sustracción de tres cuadros de motivos religiosos, una imagen de Santa Ana y otra de un arcángel en la ermita de Santa Ana de Osuna. Ante tales circunstancias, las investigaciones de este último hecho se centraron en la inspección y seguimientos de aquellos individuos relacionados con la compra-venta clandestina de antigüedades.

De esta manera, la Policía identificó a Manuel P.C., conocido como 'el alemán', quien supuestamente era el receptador de obras de arte de trascendencia artística, cuya procedencia podría ser ilícita.

La Policía descubrió que esta persona acudía de forma casi sistemática todos los jueves al mercadillo instalado en la calle Feria de la capital hispalense.

La semana pasada un grupo de agentes acudieron al mercadillo, donde se localizó el puesto en el que 'el alemán' y su hermano vendían diferentes efectos y se procedió a la intervención de varias piezas de arte de las que no podían acreditar su lícita procedencia.

Unos hermanos, Jaime H.R. y José Manuel H.R., fueron identificados como presuntos autores de los robos cometidos en Osuna. Vendieron las obras Manuel P.C., quien las depositó en la casa de su hijo en Isla Cristina (Huelva).

La Policía efectuó un registro en este domicilio del hijo del alemán y encontraron numerosas piezas procedentes de la ermita de Osuna y del domicilio particular de Espartinas.

Posteriormente, los agentes localizaron a Federico G.L como presunto autor del robo de Espartinas, que se encontraba cumpliendo pena en la cárcel de Sevilla II por otras causas.

Se han intervenido 34 pinturas, un cuadro de orfebrería de una virgen, cuatro imágenes, una cerámica, tres litografía, una de ellas firmada por Picasso, y dos platos de cerámica.

Todos los efectos han sido valorados en más de 600.000 euros, destacando el cuadro del Arcángel que asciende a 180.000 euros, si bien el presunto ladrón lo había vendido por unos 1.300 euros.