Los hechos tuvieron lugar en el barrio de la Trinidad de la capital, donde los policías locales sorprendieron e identificaron a un individuo que portaba una pastilla de hachís de cerca de 100 gramos de peso.
Tras su identificación, las pesquisas policiales llevaron a los agentes hasta un domicilio cercano de cuyo portal vieron salir a dos jóvenes, identificando a uno de ellos como presunto comprador, y al otro como el vendedor de las sustancias, el cual reconoció que llevaba varios meses parado y se dedicaba a vender hachís, ofreciéndose voluntariamente a colaborar con los policías locales y entregar todo lo que tenía en su domicilio.
La pareja de la víctima, que presuntamente también era partícipe del hecho delictivo, accedió al interior de la vivienda e hizo entrega voluntaria de diferentes útiles y armas con las que contaban, siendo intervenidos por los policías locales un total de ocho trozos de hachís con un peso total aproximado de 700 gramos, una bolsa con unos 25 gramos de marihuana, una balanza de precisión, una pistola simulada, un cuchillo de 24 centímetros, una navaja de 14 centímetros, dos teléfonos móviles y 480 euros.
Además, quedó pendiente una entrada y registro más exhaustiva en el inmueble una vez se contase con el oportuno mandamiento judicial para ello. Ante los hechos, los policías locales procedieron a la detención de los tres implicados y a su traslado a dependencias policiales, siendo, posteriormente, puestos a disposición judicial.
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