La investigada habría simulado el robo de su teléfono móvil para poder recibir su reposición, a través de un seguro que cubría ese tipo de hecho delictivo. Un familiar de la detenida, que habría participado en la venta del terminal en un establecimiento de compraventa de efectos de segunda mano, ha sido oído en declaración como investigado.
El inicio de la investigación tuvo lugar a raíz de la denuncia de una joven que manifestaba haber sido víctima del robo de su teléfono móvil, ha informado la Policía Nacional a través de un comunicado.
Diversas contradicciones de la supuesta víctima levantaron las sospechas de los agentes que, tras varias indagaciones, confirmaron que el teléfono no había sido robado.
Los investigadores comprobaron cómo la denunciante, en connivencia con un familiar, investigado como cómplice de la anterior, vendió el teléfono en una tienda de compraventa de efectos de segunda mano.
Por último, la presunta perjudicada ha sido detenida por su responsabilidad en los hechos, ya que había iniciado los trámites para que su compañía de seguros le repusiera el teléfono por los hechos falsamente denunciados.
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