En la misiva, se indica que la lista de Merino era la candidatura que validó la Secretaría de Acción Institucional Provincial. Los firmantes se dirigen a Ribera para denunciar lo que consideran "uno de los mayores escándalos que se recuerdan en nuestra democracia en materia electoral: 'el cambiazo de Castellón'".

Aseguran que nada les "entristece" más que haber tenido que denunciar en sede judicial el "secuestro" de su candidatura por parte de la diputada nacional, Sandrá Juliá, "persona no autorizada a tomar esa decisión, a presentarla".

Según explican en la carta, no buscan "afán de protagonismo ni notoriedad", ni les mueve "el hacer daño", y piden a Ribera que tome medidas "para desmarcarse del que puede ser un hito en la crónica negra electoral de España: la imputación, ahora investigación, de una Junta Local al completo y toda una candidatura".

"En Castellón no había dos listas, sólo una. En Castellón se ha cometido un asalto a la democracia, sólo uno. Esto es lo que hacían los viejos partidos y, como presidente de Ciudadanos, no puedes ni debes permitirlo", indica la carta.

Finalmente, estos componentes de la lista de Merino señalan que si públicamente la diputada nacional Sandra Juliá pide disculpas a su candidatura y reconoce la legitimidad de Jesús Merino como alcaldable, retirarán las denuncias presentadas.

Además, añaden que, tras ese anuncio, deberá ser cesada "de forma fulminante" por el partido. "Una persona que ha causado tanto daño a Ciudadanos en Castellón, a nosotros y a nuestras familias, no puede sentarse al lado tuyo en el Congreso de los Diputados", finaliza la misiva.