Los hechos sucedieron en agosto de 2017, cuando se celebraba la fiesta de cumpleaños de la nieta del hombre en la vivienda de los padres de la niña en una localidad de la provincia. Según se declara probado, el acusado, que "no tenía costumbre de jugar con niños menores ni con su nieta", realizó a las niñas "diversos tocamientos".
La Sala señala en su sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, que el procesado aprovechó el momento en que las niñas jugaban solas en el salón de la casa, mientras que las familias estaban en otra parte de la casa; "llegando a invitarlas para que le acompañaran al baño para mostrarles sus genitales".
El Tribunal le da "plena credibilidad" a las víctimas, de entre nueve y diez años, frente al acusado que negó los abusos. Así, considera que el testimonio de las niñas es "claro, coherente y perfectamente lógico y creíble, pues han logrado describir con perfecta precisión cuál fue el comportamiento del acusado".
Así, se le condena por tres delitos de abusos sexuales a la pena de dos años de prisión por cada uno y por otro delito del mismo tipo, en la persona de su nieta, por el que se le impone cuatro años de cárcel. En cuanto a la libertad vigilada durante cinco años, su cumplimiento será posterior a la pena de prisión.
También se le impone la prohibición durante cinco años de aproximarse a menos de 500 metros a las menores en cualquier lugar o comunicarse con ellas por cualquier medio.
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