«Si un turista viene a Bilbao y no ha recabado información, nosotros se la facilitamos desde su punto de partida, en el mismo avión». Es la premisa de la que parte la nueva iniciativa de Bilbao Centro, la asociación de comerciantes que trata de promocionar el turismo a través de las compras y el ocio en la ciudad.

La asociación ya está negociando con diferentes aerolíneas que llegan a Bilbao –aunque aún no han concretado las ciudades de origen–, así como con el propio aeródromo vizcaíno, para repartir entre los turistas europeos dos tipos de folletos que resumen las actividades que se ofrecen en la ciudad.

De un lado, un mapa en el que el visitante puede mirar "los museos y lugares especiales y también dónde comer, dónde comprar o ir de fiesta", explica Jorge Ayo, gerente de la asociación.

El segundo folleto es una guía en la que se ofrece un programa de día completamente organizado. Y todo, envuelto con un delicado pañuelo de seda. Ya se han editado 4.000 guías y 10.000 mapas.

Del bus turístico a la lista de bares

La experiencia turística en Bilbao está dando pasos de gigante. Hace algunos años, trabajar para el turismo sonaba a extrañeza, pero poco a poco, e impulsada por las cifras de visitantes, la ciudad mueve los hilos. Un bus turístico, del estilo a los de Sevilla, Valencia o San Sebastián, recorre la ciudad. Con el calor también hay bicis turísticas y desde esta Semana Santa se publica la lista de bares y restaurantes abiertos. El turismo manda.

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