Según detalla la federación en un comunicado, los criterios generales que recoge el PEP son "la obligatoriedad de 3 metros de circulación peatonal, dejar una línea de paso de fachada de 1,80 metros y establecer un máximo de ocupación en plazas de un 20% de su superficie".

La aplicación de estas medidas en el PEP, a juicio de la FEHV, "supondría la eliminación automática de muchas terrazas de esta zona, así como una drástica reducción de la superficie en otros casos".

"Teniendo en cuenta la presencia en el centro histórico de establecimientos emblemáticos, y en algunos casos centenarios, que tienen integradas las terrazas en el entorno de estas calles, y que suponen un atractivo turístico para el barrio y para los propios vecinos de la zona, así como una actividad empresarial que genera riqueza y empleo", han manifestado.

Es por ello, que desde la FEHV reclamamos la sustitución de estos criterios por el régimen especial ya establecido para Ciutat Vella en la ordenanza de terrazas, y que establece unos criterios concretos como la obligación de realizar estudios especiales de cada una de las calles afectadas y plazas, así como una línea de paso de 1,20m.

Respecto a las terrazas situadas en alrededor de los bienes de interés cultural, "la Federación pide mantener las ubicaciones actuales, así como arbitrar un sistema en el que participe la Federación, ya sea en una comisión especial o dentro de la comisión de patrimonio y que permita evaluar caso por caso aquellas terrazas que se puedan ver afectadas, para darle una solución de viabilidad a la terraza con los valores de protección de los BIC".

Por último, respecto a las viviendas turísticas, "consideramos que el PEP debe de servir para regular este tipo de actividades en Ciutat Vella y controlar su implantación en este barrio de la ciudad".