Según informa la Jefatura Superior de Policía de Canarias, los hechos se desencadenaron cuando los agentes trasladaron a un interno hasta un centro médico ante tras las sospechas de que pudiera haber ocultado en el interior de su organismo distintas sustancias estupefacientes facilitadas por sus familiares durante un vis a vis.
La exploración facultativa permitió comprobar que el preso, que cumple actualmente condena por homicidio, ocultaba en el interior de su cuerpo dos objetos de gran tamaño, que resultaron ser dos trozos de hachís con un peso total de 35 gramos.
En este sentido, los tres familiares que asistieron a la visita fueron detenidos como presuntos autores de un delito contra la salud pública, mientras que el preso fue investigado también como presunto autor del mismo delito.
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