Así lo ha remarcado Puig, en atención a los medios de comunicación, tras mantener este miércoles una reunión con responsables de la Conselleria de Agricultura y con la Abogacía para estudiar la sentencia del alto tribunal que anula algunos artículos del Plan Hidrológico del Tajo por no fijar caudales ecológicos en Aranjuez, Toledo y Talavera de la Reina. Esta sentencia, emitida el pasado 11 de marzo, resuelve el recurso contra el vigente Plan Hidrológico de la cuenca del Tajo aprobado por el Real Decreto 1/2016.

El 'president' ha explicado que han estudiado la sentencia para "actuar con rigor y sin hacer lecturas interesadas, parciales y partidistas" y, tras este trabajo, la Generalitat concluye que la sentencia "consolida la norma reguladora del sistema Tajo-Segura" de 2014 que "en absoluto queda invalidada", ha remarcado.

Por tanto, ha querido lanzar un mensaje de "tranquilidad" a los regantes porque "no hay una ruptura del status quo actual". Además, ha defendido que la sentencia "consolida la solidaridad porque afianza y jerarquiza los usos por encima de las pretensiones territoriales" y "se abre una ventana de oportunidad para legislar mejor el sistema del trasvase y el sistema hidrográfico español".

Ha señalado que el la decisión del Supremo pone de manifiesto la "preocupación" por los caudales ecológicos, una cuestión que interesa a la Comunitat por la importancia de contar con "un río vivo y con futuro".

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