El jefe provincial de Tráfico, Ignacio Campomanes, adelantó hoy en Gijón que se prevén unos 650.000 desplazamientos por las carreteras asturianas esta Semana Santa, por lo que la Guardia Civil y la Jefatura de Tráfico tomarán medidas "muy especiales" para vigilar toda la red viaria, sobre todo los puntos que puedan ser más conflictivos y la red secundaria.

Entre otras cosas, se montará un dispositivo formado por unos 360 agentes de la Guardia Civil e incrementarán los controles de velocidad y alcoholemia.

Campomanes, que hizo estas declaraciones tras la presentación de una campaña de seguridad vial en el campus de Viesques, indicó que en 2009 se instalarán diez nuevos radares fijos en el Principado.

Asimismo, pidió mucha prudencia a los conductores, llevar siempre los cinturones abrochados, tantos los delanteros como los traseros, moderar la velocidad, y no conducir bajo los efectos del alcohol o cuando se está hablando por el móvil, entre otras cosas.

También hizo un llamamiento a los acompañantes, para que si intenten que el conductor no se ponga al volante si ven que no está en condiciones para ello.

Además, pidió que se tengan en cuenta las condiciones meteorológicas, especialmente en caso de viento y lluvia.

En cuanto a los desplazamientos en Semana Santa, se espera que el número aumente "un poco" y recordó que en 2007 fallecieron tres personas en accidente de tráfico en las carreteras asturianas. En total, el pasado año el número de víctimas mortales en el Principado fue de 50.