La investigación se inició al tener conocimiento de los hechos mediante la denuncia de la víctima, en la que se alertaba de una extorsión cometida por parte de un conocido que le llevó a una vivienda, donde le retuvo en contra de su voluntad, no permitiéndole salir, al tiempo que le exigía dinero para su liberación y le mostraba una pistola para amedrentarle y poder llevar a cabo su propósito.
El secuestrador ofrecía a la víctima dos opciones, o bien le entregaba los 10.000 euros, o bien sólo le daba 5.000 si le conseguía un contrato en su empresa. Finalmente, la víctima accedió al pago exigido para su liberación, quedando ambos en realizar la entrega del dinero en un lugar concreto, según ha informado la Policía Nacional en nota de prensa.
Los investigadores, teniendo constancia de esto último, establecieron un dispositivo en el lugar elegido para la entrega del dinero, concretamente, en un polígono industrial de dicha localidad, y al hacer acto de presencia, se procedió a su detención.
Con posterioridad, se registró la vivienda donde habían ocurrido los hechos, localizando la pistola con la que intimidó a la victima, resultando ser una pistola de aire comprimido.
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