La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, aseguró el domingo que hay países que "han presentado quejas" a España porque se han producido algunos "problemas de salud" debido a que productos de la huerta murciana se están regando con aguas fecales por la falta de agua potable.

"Cuando no hay agua potable se usan otro tipo de aguas. Es un problema real y debería preocupar también a los castellanomanchegos", ha dicho la ministra.

Las declaraciones de Narbona se producen un día después de que el Gobierno aprobara el trasvase de 82 hectómetros cúbicos (39 para consumo humano y 43 para regadío) del Tajo al Segura para paliar la sequía.

El Ejecutivo adoptó una decisión salomónica que dejó insatisfechas a las regiones afectadas, ya que Castilla La Mancha sólo quería donar 30 hectómetros y Murcia quería 120.

"Medidas contundentes"

Las organizaciones agrarias murcianas han anunciado que tomarán “medidas contundentes” contra la decisión del Gobierno, medidas que decidirán el martes en asamblea.

Aseguran que los hectómetros destinados a regadío son muy inferiores a los 120 que pedían los regantes, por lo que las consecuencias serán terribles en la pérdida de arbolado, la reducción en las nuevas plantaciones y la desaparición de miles de empleos.

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