El Instituto Vasco de la Mujer-Emakunde abrirá este martes y hasta el 12 de abril el periodo de audiencia pública del borrador del anteproyecto de Ley de modificación de la Ley para la Igualdad de Mujeres y Hombres, un instrumento normativo con el que busca "mejorar y reforzar" la respuesta institucional ante la violencia contra las mujeres en Euskadi.

En un comunicado, Emakunde ha informado de que la ciudadanía podrá consultar el borrador del anteproyecto y realizar sus aportaciones a través de Irekia, de la página de Emakunde, o a través de correo electrónico (emakunde.legealdaketa@euskadi.eus) o por correo postal a la C/Manuel Iradier, 36, 01005 de Vitoria.

Emakunde ha organizado tres sesiones abiertas, en las sedes del Gobierno Vasco de las tres capitales vascas, destinadas a la participación de cualquier persona, agente u organización interesada en el anteproyecto. En ellas, se hará una presentación del borrador del anteproyecto y se recordarán los medios y plazos para la realización de las aportaciones.

La primera tendrá lugar el 20 de marzo en San Sebastián, de 16.30 a 17.30 horas, y el 25 de marzo se celebrará una primera sesión en Vitoria de 11.00 a 12.00 horas y otra en Bilbao de 16.30 a 17.30 horas.

A través de esta modificación de la ley, el Instituto vasco de la Mujer ha explicado que quiere "posibilitar una política y un pacto de país con mayúsculas" por la igualdad y contra la violencia machista, "reforzándola y adaptándola a las nuevas necesidades y retos derivados del nuevo contexto social y normativo".

A nivel normativo, ha recordado la obligación de adecuar el ordenamiento jurídico vasco al Convenio de Estambul adoptado por el Consejo de Europa en 2011 y entró en vigor en el Estado español en 2014.

DISCRIMINACIÓN Y VIOLENCIA

Según ha explicado, el Convenio de Estambul insta a legislar "reafirmando el vínculo existente entre la discriminación por motivos de género y la violencia contra las mujeres".

En este sentido, ha explicado que "reforzar este vínculo" ha sido la razón por la que se ha decidido no elaborar una ley diferenciada y específica en materia de violencia contra las mujeres, sino la modificación de la Ley para la Igualdad de Mujeres y Hombres aprobada en 2005 por el Parlamento Vasco que ya regulaba esta cuestión, junto con el resto de las manifestaciones de la desigualdad.

Asimismo, ha explicado que durante los años 2017 y 2018 se ha desarrollado un proceso participativo que ha sido "fundamental para identificar desafíos y espacios de mejora, así como para dilucidar la fórmula legislativa más adecuada para afrontarlos" y ha agradecido la participación y las aportaciones recibidas.

Paralelamente, también se llevó a cabo una evaluación de los estándares de calidad en la atención a mujeres víctimas de violencia, "algunos de cuyos desafíos también se han incorporado".