Este importe se obtiene de la suma del dividendo a cuenta de 2018, ya abonado a los accionistas el 5 de febrero -que ascendió a 0,151 euros brutos por acción- y de los 0,20 euros brutos por acción de dividendo complementario, que se distribuirá en julio, si así lo aprueba la Junta General de Accionistas de Iberdrola.

El Consejo de Administración de Iberdrola propondrá a la Junta General de Accionistas, convocada el próximo 29 de marzo, la distribución de una retribución anual de 0,351 euros por acción, lo que supone un aumento del 7,7% respecto al repartido en 2017.

La distribución del dividendo se realizará en el marco del programa Iberdrola Dividendo Flexible, por el que los accionistas pueden elegir entre recibir su retribución en efectivo o en acciones de la compañía de forma gratuita.