Los más de 40.000 enfermos crónicos de Aragón ya no tendrán que esperar hasta diez días para poder

comprar los medicamentos que les recetan los especialistas para sus enfermedades, como ocurre con el actual sistema de visado de recetas. En pocos días, cada paciente podrá acudir a la farmacia, donde se le dispensará el fármaco automáticamente gracias a un nuevo sistema de gestión por Internet.

Esto supondrá un ahorro de tiempo respecto al sistema actual, en el que el enfermo tiene que ir a su médico de cabecera para que le recete el fármaco y dejar luego la receta para su visado en el centro de salud. De allí pasa por inspección sanitaria para asegurar que ese medicamento está autorizado para ese paciente. Entre siete y diez días después el enfermo puede recogerla en su centro de salud.

Con el nuevo método, el enfermo tan sólo tendrá que ir al médico una vez y acudir con su receta a la farmacia. El farmacéutico comprobará en la web del Salud que realmente un médico ha recetado ese fármaco y lo dispensará sin más demoras.

Este sistema, que no supondrá ningún coste adicional para los pacientes, se llevará a cabo en el 93% de las farmacias de Zaragoza, y también se implantará en Huesca y Teruel.

Para dar un mejor servicio, los farmacéuticos de Zaragoza han realizado un curso durante un mes sobre informática en general e Internet, ya que «algunos de ellos no manejan normalmente el ordenador», explica juan Carlos Gimeno, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza.

Actualmente, en las oficinas de farmacia se sellan aproximadamente 2.000 recetas al día de estos medicamentos que por su particular química necesitan una mayor inspección. Este sistema desaparecerá con la implantación del nuevo método, que lo que pretende es, según Juan Carlos Gimeno, «facilitarle la labor al paciente, que es el eje del sistema sanitario».

Los pacientes sólo tendrán que llevar a la farmacia la receta y la tarjeta sanitaria para conseguir su fármaco.

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