El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este jueves el Estado de derecho y la independencia judicial en España y ha alertado de los proyectos basados "mentira y manipulación" ante el Consejo de Europa, la institución de la que forma parte el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo al que en el pasado han recurrido independentistas por vulneración de sus derechos en España y al que miran los políticos catalanes si son condenados en el juicio contra el procés que empieza la semana que viene en el Tribunal Supremo.

"La España de hoy es una democracia plena, moderna, avanzada, que asume como principios propios la separación de poderes, la independencia judicial y es uno de los sistemas más garantizas del mundo", ha indicado Sánchez ante una institución que, de hecho, ya se ha pronunciado a favor de España en las quejas que ya ha recibido por el sector independentista.

Sánchez ha alertado de que "cuando se prima la crispación sobre el acuerdo, la ruptura sobre la búsqueda de consenso o se defienden fórmulas simplistas la democracia se resiente" y también cuando "se recurre a la mentira, a la manipulación y a los agravios".

Una semana antes que el martes que viene empiece el juicio contra el procés en el Tribunal Supremo, Sánchez se ha trasladado a Estrasburgo para visitar el Consejo de Europa y su corte de justicia, dos instituciones encargadas de velar por la democracia, el imperio de la ley y la defensa de los derechos humanos. El Consejo de Europa está formado por 47 miembros de Europa y Asia y España forma parte de él desde 1977.

Sánchez se ha reunido con el secretario general del Consejo de Europa, Thorbjorn Jagland, y con el presidente del Tribunal de Derechos Humanos, Guido Raimondi.

Ante el Comité de Ministros del Consejo de Europa, donde ha defendido a España como un "Estado social, democrático y de derecho", con una Constitución que "consagra el derecho fundamental de todos los ciudadanos" y con un modelo de descentralización territorial que "garantiza igualdad de los ciudadanos en todos los territorios y, a la vez la unidad de España".

El presidente ha hablado este jueves ante una institución, el Consejo de Europa, que Oriol Junqueras, exvicepresidente de la Generalitat a quien la Fiscalía considera el máximo responsable del 1-O, aseguró hace meses que "sabe que España es un estado opresor". El año pasado, Jagland afirmó que en España no hay presos políticos y tiene un sistema de justicia imparcial.

El pasado octubre, su Tribunal de Derechos Humanos confirmó una sentencia del Tribunal Constitucional contra el recurso que presentó un miembro de la versión de Junta Electoral que se creó para el 1-O, que pedía una indemnización por vulneración de sus derechos fundamentales.

Sánchez ha reconocido esta corte como una instancia legítima a la que pueden recurrir los ciudadanos una vez agotadas los tribunales españoles, pero también ha recordado que entre 2013 y 2017 los recursos contra España ante el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo fueron notablemente menores que en el resto de Europa.

"En tiempo de fake news, de construcción de la realidad aumentada y de hechos alternativos, la fuerza de los datos reales dicen que en los últimos cuatro años el número de reclamaciones desde España está muy por debajo de la media de todos los estados miembros", del Consejo de Europa. Y las condenas, "aún más" bajas, seis al año, ha dicho el presidente sobre la actividad de una Corte que el independentismo catalán ve como un paso natural después de los tribunales españoles.

"A pesar del poder de los datos, hay quien sustenta su proyecto político en relatos falsos para movilizar al odio", ha subrayado.