En la vista oral, el fiscal también ha solicitado que se prohíba a los padres acercarse a su hijo durante dos años y la retirada de la patria potestad durante tres años y medio por un delito de malos tratos habituales y otro de lesiones con el agravante de parentesco.

El Ministerio Público ha sostenido que, durante unos dos años (cuando el pequeño tenía seis años de edad y hasta que se denunciaron estos hechos, en 2006), los acusados sometieron a malos tratos a su hijo. Según el fiscal, el menor explicó que su madre le golpeó en una ocasión en la cabeza, causándole una inflamación de oído, mientras que su padre le había pegado algunas veces con un bastón.

Durante ese tiempo, el niño sufrió varias lesiones, como una inflamación en la rodilla o una fractura en un codo, ha añadido la Fiscalía. La defensa, por su parte, ha solicitado la absolución de los imputados al entender que no se ha producido un caso de malos tratos.

El abogado defensor, Antoni Aluja, ha explicado que está "absolutamente convencido de la inocencia del padre", mientras que a la madre se le imputan "tres hechos puntuales" que, "tal y como señala el informe del forense, no causaron ninguna lesión al menor" y que se enmarcan en el "derecho de corrección" de los progenitores.

"Quizá los actos de la madre no están al nivel de corrección de la Europa del siglo XXI, pero son un modelo de ética para una madre en la cultura magrebí", ha añadido Aluja, que ha criticado que el fiscal haya basado su acusación en "el informe de la escuela del niño". El pequeño se encuentra actualmente bajo la guardia y custodia de sus tíos.

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