y efectos de la residencia de la Tercera Edad de Gijón en la que esta estaba ingresada.
Según una nota de prensa de la Comisaría gijonesa, la investigación se inició con la denuncia de la directora de una residencia de la Tercera Edad en la que se habían sustraído efectos de pacientes del interior de sus habitaciones y también de material de intendencia básica del centro, como gasas o pañales.
Una vez visionadas las grabaciones de las cámaras instaladas en el recinto, los agentes comprobaron que un matrimonio, un hombre y una mujer, que frecuentaban el centro,
entraban en varias estancias de la residencia y también en las zonas restringidas al personal laboral.
Los investigadores comprobaron que estas personas eran parientes de una de las personas ingresadas,
que aprovechaban las visitas
para
apoderarse de ropas y efectos de las habituaciones contiguas a la asignada a su familiar. Además habían causado daños a las cámaras de videogilancia para evitar ser descubiertos.
Una vez identificados por los agentes del Grupo II de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de Gijón, se detuvo por daños y hurto al matrimonio, de 70 y 67 años de edad y vecinos de Oviedo. Ambos solicitaron el traslado de su familiar a una residencia de Oviedo.
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