El género está dedicado al botánico alemán del siglo XVIII Joseph Gottlieb Kölreuter, que hizo aportaciones fundamentales en el tema del sexo de las plantas y su fecundación, y fue pionero en
el estudio de las hibridaciones, según han informado desde el Ayuntamiento.
El nombre de la especie se debe a sus hojas bipinnadas; cada una mide alrededor de medio metro de longitud, y se divide en una serie de pinnas que a su vez se subdividen en foliolos de ápice agudo y borde aserrado, han precisado a través de un comunicado.
En la época de floración, primavera, se llena de flores pequeñas amarillas, midiendo cada una alrededor de un centímetro y presentándose reunidas en grandes inflorescencias de algo más de medio metro.
Han apuntado que resulta especialmente llamativa su etapa con frutos, éstos son como farolillos de textura papirácea y color rosa rojizo que se torna marrón en la madurez. Miden unos cinco centímetros y tienen tres costillas muy marcadas.
Esta especie es bastante resistente, no es exigente respecto al suelo o el riego, pero prefiere un lugar soleado. En esta zona se usa con fines ornamentales, tanto como ejemplar aislado como en alineaciones; también sirve de alimento para la avifauna.
En su área de origen, el sur de China, se hacen collares con sus semillas y se obtiene un tinte amarillo de sus flores. En La Concepción puede encontrarse en el camino que une la antigua noria y la colección de palmeras.
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