La obra de teatro ha buscado "concienciar sobre el uso y reciclaje de los teléfonos móviles, el contexto y las consecuencias de su fabricación y comercialización, que ha provocado millones de muertos y desplazados".

En este sentido, en un comunicado, Irache ha llamado a la ciudadanía a que, al cambiar de teléfono móvil, no tire el anterior y lo entregue para su posterior reciclaje o reutilización.

Tras la representación de la obra, se ha ofrecido a las personas que lleven sus móviles viejos, muchas veces olvidados en algún cajón de casa, a la Oficina Municipal de Atención al Consumidor, donde se han habilitado buzones para su recepción y desde donde se gestionarán de forma adecuada para su posterior reciclaje y reutilización.

Este proyecto de Irache se enmarca en la función de formación y sensibilización de la asociación. Para esta iniciativa, ha contado con la financiación y colaboración de la Fundación Caja Navarra y la ONG Alboan.

Desde la asociación de consumidores han destacado que "este proyecto muestra de forma clara las relaciones entre el consumo que llevamos a cabo los ciudadanos de a pie, desde nuestras decisiones cotidianas, y la realidad económica y social". Y han resaltado que la obra es "un perfecto ejemplo de la responsabilidad y el papel que podemos adoptar como consumidores activos".

Según han indicado, la respuesta "ha sido muy positiva por parte de los vecinos y el público asistente ha sido muy variado, en edades y género". Y también han destacado "la colaboración e implicación de los ayuntamientos en los que se exhibe la obra".