Es debido «a que falta personal y se hacen jornadas de casi nueve horas seguidas; varios compañeros están de baja por estrés», añaden las mismas fuentes. En la actualidad, la plantilla es de unos 180 conductores. Desde la compañía, ni desmienten ni confirman estas cifras.

Precisamente, la falta de puntualidad fue la reclamación más frecuente de los alicantinos el pasado año sobre el transporte urbano en la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC). Supusieron el 50% del totales, que fueron 64. Subús recibía en 2006 (últimos datos) una queja a diario, por todo tipo de cosas.

En la OMIC, llegan por caídas, conflictos con el conductor, publicidad engañosa, no admitir los bonobuses al no haberse canjeado por la Móbilis o el precio abusivo.

Un estudio de Consumer vio a los buses de Alicante y A Coruña como los peores.