La incertidumbre que genera el 21-D está afectando a la planificación de las escuelas y los institutos catalanes. Algunos ya han comenzado a comunicar a las familias cambios en las actividades previstas para el próximo viernes, último día del trimestre, que normalmente son celebraciones relacionadas con la Navidad.

No poder garantizar el funcionamiento normal del centro es el principal motivo que alegan algunas escuelas consultadas. El Departament d'Educació recuerda que el 21-D es un día lectivo y que se ha de garantizar que los centros estén abiertos, pero admite que el cambio de agenda depende de las direcciones.

Paralelamente, Docents per la República hace un llamamiento a los profesionales a movilizarse durante toda la jornada.

En el instituto Joan Miró de Cornellà de Llobregat, los alumnos tienen prevista una salida cultural para este viernes, planificada desde el inicio del curso y que implica a cerca de 500 alumnos. Las posibles movilizaciones por la reunión del Consejo de Ministros y la huelga convocada por la Intersindical ha condicionado al equipo directivo, que ha decidido suspender la actividad y trasladarla al trimestre siguiente.

La salida implicaba coger autocares y la posibilidad de que no se pueda circular con normalidad por carretera ese día les ha hecho tomar esta decisión, que ya han comunicado a lo padres. Es uno de los ejemplos de las escuelas e institutos que esta semana trabajan conla posibilidad de anular o modificar las actividades programadas para el 21-D.

En como mínimo tres escuelas de Mollerussa, por ejemplo, el 21-D era el día escogido para celebrar el festival de Navidad, pero ya han comunicado a las familias, a través de una circular, que trasladan la celebración al día 20. Alegan que "acontecimientos externos" en la escuela les hacen esperar "posibles incidencias" en el funcionamiento del centro y, por tanto, apuestan por cambiar la fecha. En otros centros de la demarcación de Lleida también se ha avanzado al jueves la entrega de notas, trabajos manuales, hacer cagar el tió o el festival.

Durante toda esta semana son muchos los centros que acabarán de decidir qué harán el viernes. La escuela Ítaca de Manresa, por ejemplo, reconoce que no tienen ninguna actividad concreta pero que es el día en el que se han de entregar los informes a los alumnos. En función de cómo avancen los acontecimientos, valorarán tenerlos a punto para el jueves o si es necesario avanzar la entrega. También en Manresa, la guardería La Llum ha decidido avanzar la actividad de hacer cagar el tió, planificada para el viernes, "en previsión de lo que pueda pasar". De todas maneras, no lo acabarán de decidir hasta el último momento. 

Una de las escuelas que ha cambiado los planes, en la demarcación de Girona, es la Puig de les Cadiretes, de Llagostera. El claustro decidió que ante la imposibilidad de tener "problemas" para llegar al centro educativo el viernes, se decidió avanzar el festival de Navidad, ya que es un acontecimiento que requiere muchos ensayos y mucha preparación por parte de los alumnos. Las mismas fuentes apuntan a que la mayoría de las escuelas han tomado decisiones en este sentido a raíz de las informaciones que aparecen en las redes sociales sobre un "paro de país", similar al del 3-O pero sin convocatoria por parte de la administración.

Estas medidas también están afectando a centros educativos de otros ámbitos, por ejemplo, al Instituto Goethe de Barcelona, que decidió el lunes suspender las clases programadas para el 21-D y recuperarlas el 15 de febrero. Fuentes del centro explican que la decisión se ha tomado porque no es seguro que alumnos y profesores puedan acudir al centro ese día.

Fuentes sindicales han señalado que son muchas las escuelas que tienen esta inquietud y que la sensación de que habrá afectaciones importantes, por ejemplo en el transporte público o en las carreteras, hacen pensar que es posible que no todo el equipo docente pueda llegar a la escuela.

Desde el Departament d'Educació se recuerda que el 21-D es un día lectivo y que las direcciones, haciendo uso de la autonomía del centro, pueden decidir cualquier cambio en la programación. Es un día en el que, además, muchas escuelas hacen jornada intensiva y los niños acaban la clase después de comer, pero con todo y con eso, la apertura de las escuelas está garantizada.

La federación de AMPA de Cataluña, Fapac, no ha recibido ninguna queja ni consulta sobre el 21-D de padres y madres de alumnos, por lo que ni han marcado ninguna directriz ni han emitido comunicado alguno sobre esta jornada. Una portavoz de la entidad explica a este diario que "respetan la libertad de decisión de cada familia" en este caso.

Las principales asociaciones de comerciantes (Barcelona Oberta, Comertia, Cecot Comerç, Fundació Barcelona Comerç, Retail.cat) han hecho esta misma semana un comunicado conjunto en el que piden calma a los asociados para que las tiendas no se vean afectadas por las protestas convocadas. No en vano, la campaña navideña supone el 25% de la facturación anual según datos del sector. También han pedido a las autoridades que garanticen la "normalidad" durante la jornada.

A través de las redes sociales, el colectivo Docents per la República han iniciado una campaña para animar a maestros y profesores a participar en las movilizaciones. En un hilo en Twitter, el colectivo propone a los funcionarios solicitar una licencia de asuntos propios para poder ausentarse de las escuelas este viernes que viene. 

También explicitan que los funcionarios e interinos pueden justificar la ausencia por "deber inexcusable" relacionado con la conciliación, que en caso de "fuerza mayor" como podría ser un bloqueo de carreteras, se puede justificar después.

Por último, el colectivo también pone sobre la mesa la posibilidad de que maestros y profesores asuman la reducción proporcional del sueldo y una "posible" falta leve que podría comportar la ausencia injustificada de un día. Según Docents per la República, maestros y profesores no hacen toda la jornada en el centro y, por lo tanto, consideran "difícil de probar" que no se ha trabajado.