El Obispado de Córdoba ha agradecido su generosidad a la comunidad carmelita y la colaboración a la alcaldía de Bujalance en el proceso de cesión para que el edificio tenga el uso educativo del que disfrutarán los niños y jóvenes de la localidad, ha señalado la diócesis en una nota.

Asimismo, el Obispado ha dado las gracias especialmente a la orden carmelita por su disponibilidad para que la iglesia conventual siga destinándose al culto por parte de la Diócesis de Córdoba.

La Fundación Diocesana Santos Mártires estima que unos 225 alumnos de las enseñanzas Infantil y Primaria, y otros 70 alumnos de Bachillerato ocuparán las instalaciones del convento cuando se adapte a su nueva función.

El director del colegio, Diego Borrego, ha manifestado su satisfacción por este traslado, ya que "este edificio tan emblemático queda a disposición de los bujalanceños, con una nueva actividad que seguirá aportando valor a los niños y jóvenes del pueblo".

El convento ocupa un espacio total de 4.000 metros cuadrados, de los cuales están construidos 3.000, pronto comenzarán las obras de adaptación del espacio para la nueva actividad educativa.